Los tendones flexores de mano son las bandas de tejido fibroso conectadas a los músculos flexores del antebrazo que cumplen la función de flexionar los dedos hacia la palma.
La inflamación, la laceración o la ruptura de uno de esos tendones suele causar dolor e incapacidad para flexionar los dedos y agarrar con la mano.
Este tipo de lesión, particularmente los cortes y los traumatismos penetrantes en los tendones flexores, se debe comúnmente a accidentes con un cuchillo o un vidrio en el hogar o una herramienta en el lugar de trabajo.
Pero la ruptura parcial o total de un tendón también puede deberse a un tirón fuerte y repentino, característico de ciertas prácticas deportivas, como las que realizan los porteros, en el futbol, y los jugadores de baloncesto, cuando la bola escapa de sus manos.
Como consecuencia del corte o el desgarre, el tendón se retrae, tira desde el sitio de la laceración y retrocede a través de las poleas del tendón. La lesión también puede abarcar nervios y vasos sanguíneos ubicados de manera paralela a los tendones.
Además de los cortes y los traumatismos, existen otras lesiones que afectan las funciones de la mano, como las afecciones inflamatorias asociadas a la artritis reumatoide.
Tratamiento para las lesiones de tendones flexores
Para reparar el tendón retraído se necesita localizar los extremos y enhebrarlos, antes de que se vuelvan a unir de manera natural pero defectuosa.
Los tendones flexores de la mano, cuya función es ayudar al funcionamiento de las estructuras anatómicas de la mano, se dividen en tres grupos principales:
- Tendones flexores del carpo: El palmar mayor, el palmar menor y el cubital anterior.
- Tendones flexores de los dedos largos: Se trata de los flexores profundos de los dedos, que se insertan en la falange distal y los flexores superficiales de los dedos que rodean al flexor profundo.
- Tendón flexor largo del pulgar.
En presencia de dolor y dificultad para mover los dedos de la mano, el paciente debe acudir a consulta médica, para valorar el desempeño de los tendones y definir si el tratamiento sólo amerita prácticas terapéuticas o exige una intervención quirúrgica.
El examen clínico consiste en una evaluación del movimiento activo y pasivo de los tendones flexores, y tiene el objetivo de determinar si uno de ellos se encuentra hiperextendido y evidenciar si el dedo adolorido presenta menos tención que los demás.
Cuando hay un corte o un traumatismo penetrante, en un tendón extensor, el tratamiento siempre es quirúrgico: Consiste en la sutura directa de los cabos del tendón, la limpieza de la zona afectada y el cierre de la herida externa.
Tras la sutura, se inmovilizan las articulaciones, mediante férulas dinámicas hechas a la medida de cada paciente y situación, por un lapso de tres semanas, aproximadamente, y una adecuada rehabilitación, con el fin de evitar la rigidez de las articulaciones.
Ante la sospecha de que sufre lesiones de tendones flexores de mano, no dude en contactarnos. En Orthopedik somos especialistas en el diagnóstico y tratamiento de lesiones músculo esqueléticas.